La Prensa de Colorado Noche de terror para los Broncos de Denver en el juego estelar del domingo, donde los de la Milla Alta dieron una actuación malísima. Algo que no se les
veía en años por lo cual cayeron derrotados 23 a 10 esto ante los Giants de New York.
Los cuales no contaban con sus receptores titulares y contaban con problemas en el vestidor y sin dejar de mencionar que no habían ganado un juego en toda la temporada, pero si algo les asienta a los de la gran manzana es el Sunday Night Football donde por lo regular dan buenos juegos y esta no fue la excepción.
La ofensiva de los Azul Naranja se mostró desinflada y sin un plan de juego, algo de preocupar cuando tuviste una semana de descanso su mariscal Trevor Siemian se cansó de hacer malos pases, dos de ellos terminaron en intercepción y uno en su propia zona de anotación.
Siemian al no contar con una ataque terrestre y verse en el marcador abajo desde muy temprano en el juego no tuvo de otra que ponerse a lanzar con lo que fue una presa fácil para la línea defensiva de los Giants que es de lo mejor que tienen los de New York.
El que tuvo una noche también fatal fue el pateador de goles de campo Brandon McManus quien falló un par, esto ya se le esta haciendo costumbre desde que le dieron una extensión de contrato, el Kicker no ha sido el pateador confiable que ayudó a los Broncos a ganar el Super Bowl 50.
La defensa por su parte, no fue tan efectiva como en otras ocasiones ya que permitió que le corrieran el ovoide lo que le dio más tranquilidad al hermano más pequeño de los Manning, quien mostró porque es un doble ganador del Super domingo, y al no contar con sus estelares receptores, se manejó con sus alas cerradas las cuales tuvieron una gran noche.
Lo único positivo de la noche para los Broncos fue la actuación de Demaryius Thomas quien a pesar de que estuvo tocado de una de sus piernas lo dejó todo en la cancha y terminó con 10 recepciones para 133 yardas con estos números el número 88 pasó la cifra mágica de las 8000 yardas por recepción esto en 106 juegos jugados.
Sus compañeros, Emmanuel Sanders e Isaiah McKenzie, fueron también parte de la noche oscura al salir lesionados de gravedad lo que los pudiera dejar fuera de circulación por un buen tiempo.
