Mary Flores De acuerdo a una investigación del Pew y publicada recientemente, destaca que la tasa de deserción escolar entre los estudiantes hispanos ha disminuido drásticamente en la última década, alcanzando un mínimo histórico de 10%, además de que los estudiantes hispanos se inscriben en la universidad a tasas más altas, lo que se puede traducir en que el apoyo de las familias hispanas y su involucramiento con sus hijos en su etapa escolar es un factor clave para reflejarse en el éxito, académicamente y financieramente; aunque haya momentos en que los estudiantes se puedan enfrentar a altos costos inesperados y pudieran frustrarse con el éxito.
La información que los padres y estudiantes reciben debe ser mayormente transparente, porque si se toman decisiones más acertadas en los costos de los estudios, todo esto ayuda y hace que el estudiante logre terminar y cristalizar su sueño, sin tanta preocupación y no le cuesta más de lo que es y puede pagar. Ahora en día hay muchos latinos que están luchando con todo esto para terminar sus estudios universitarios y al final: terminan los estudios, pero endeudados por un largo tiempo y pagando altos intereses.
Como estudiante debe asegurarse de tener un plan estratégico enfocado en el éxito y esto es posible lograrlo preguntando, pidiendo apoyo e informándose con sus maestros o personal administrativo de la universidad. Muchos estudiantes latinos y no latinos, tienen obligaciones familiares que les obligan a trabajar e ir a la escuela en un tiempo parcial, haciendo un gran esfuerzo para lograr sus sueños. Como latinos somos una población que está en
desventaja y toca hacer muchos sacrificios para acceder a la educación superior y graduarse.
Gracias a todos estos esfuerzos se está logrando cambiar las estadísticas de que los latinos son los que menos logran llegar a la universidad y graduarse.
Según una investigación del Pew y publicada recientemente, pone en evidencia que la tasa de deserción escolar entre estudiantes hispanos ha disminuido drásticamente en la última década, alcanzando un mínimo histórico de 10 por ciento. Además, “los estudiantes hispanos se inscriben en la universidad a tasas más altas”, señala dicha investigación. En 2016, el trabajo de Pew indica que el 47 por ciento de los hispanos de entre 18 y 24 años se matricularon en la universidad, en comparación con el 35 por ciento de la década anterior.
Cabe destacar, que cada vez son más los estudiantes latinos mayores de edad que van al colegio, y es por eso que algunas universidades están respondiendo al aumento de los estudiantes adultos y sus diferentes circunstancias, como hacer malabares con las responsabilidades familiares y trabajar junto con lo académico. Por ejemplo, algunas universidades incluyen la expansión de ofertas de cursos en línea, la racionalización del proceso para transferir créditos de una institución a otra y el desarrollo de más programas de certificación.
