González-Flores * El impacto de las
Iglesias Santuario
El He tenido la oportunidad de seguir de cerca la historia de tres personas que se vieron en la necesidad de refugiarse en las llamadas Iglesia Santuario.Sin lugar a dudas, un espacio que ha significado más que un hogar para aquellos que enfrentan la deportación y el peligro de ser separados de su familia y de su ritmo de vida.
Son historias fuertes, llenas de sentimientos encontrados, pero que al final, tener como última opción para refugiarse en estos sagrados lugares, les permite seguir luchando por su permanencia y de alguna manera mantener encendida la “llama de la esperanza”.
Recuerdo bien a Arturo, Jeanette e Ingrid – a quienes tuve el privilegio de entrevistar- y del gran valor que mostraban por estar ahí, mucha fortaleza y
también por algunos momentos se sentían que el mundo se les venía abajo; pero gracias al apoyo de amigos, de la familia misma y organizaciones, seguían de pie luchando por una mejor justicia.
Bueno, este tema lo comento porque recientemente (3 de mayo) las comunidades de fe, el clero y los inmigrantes participaron en lo que fue la Primera Caminata Nacional, una fecha que ha sido seleccionado como un día interreligioso, de silencio para la oración y una acción para mostrar la solidaridad con los líderes inmigrantes que han sido desafiados después de oponerse a la deportación y a las políticas de detención.
Primero, quiero aprovechar estas líneas para felicitar y darle el reconocimiento a su trabajo, a Jennifer Piper de la organización AFSC, por su incansable lucha y calidad humana por ayudar a muchas familias que viven esta difícil situación de la deportación. He tenido la oportunidad de entrevistarla un sinfín de veces, pero, sobre todo, ver como se entrega a su trabajo y su manera tan humana de ayudar a las personas, que no solo han buscado refugiarse a una Iglesia Santuario, sino a las familias enteras y muchas personas que llegan para pedirle su apoyo.
Honor a quien honor merece…
Y, segundo, por mantenernos informados a través de la Coalición Santuario Metro Denver, y de conocer más sobre la Primer Caminata Nacional de Jericó, la cual forma parte de un esfuerzo nacional que se lleva a cabo en 12 ciudades principales de los Estados Unidos, con el fin de demostrar la solidaridad con los más de 40 líderes en 15 estados que han sacrificado su libertad, clamando el Santuario en lugares de culto, para exponer la injusticia de sus órdenes de deportación.
¿Pero por qué Caminata de Jericó? Bueno, de acuerdo a Piper, se trata de una oración interreligiosa silenciosa y un acto de solidaridad.
La caminata se inspira por la Batalla de Jericó (Josué 5: 13-6: 27), en la cual la comunidad marchó siete veces alrededor de la ciudad de Jericó, causando la caída de los muros de la ciudad.
La caminata de Jericó, es una caminata silenciosa, pacífica y llena de oración para derribar los muros de nuestro sistema de inmigración injusta y está abierta a personas de todo o nada de fe.
Actualmente, viven en un Santuario, Ingrid y Araceli.
