R. "El Cid" Diaz ¡Lo que sucedió….
cuando los hombres
eran hombres!
Vengo de un lugar y una época en que se esperaba que los hombres fueran hombres.
Donde no estaba mal visto que un hombre defendiera el honor de una mujer.
Donde un hombre no dudaría en abrirle la puerta a una mujer, y le dijeran “gracias”.
Donde la salud y el bienestar de su prójimo era más importante que depilarse las cejas o recortar su barba.
Donde los hombres se enfrentarían cara a cara para resolver un problema y no esconderse detrás de un monitor y un teclado.
Donde los hombres se encontrarían con ideas y planes y no chismearían y engañarían a sus semejantes.
Donde los hombres estaban proporcionando mantas, ropa, comida para las personas sin hogar, viudas y huérfanas y no gastando grandes sumas de dinero en su guardarropa.
Cuando los hombres no se quejaban por la opinión de alguien insignificante, las palabras inútiles se resbalaban de ellos y su carácter nunca se veía afectado.
Cuando los hombres decían lo que decían y decían a qué se referían, lo que decían y lo que realmente hacían era lo mismo.
Haya en aquellos tiempos, en mi país de origen, tuvimos esos hombres. Tuvimos un Rey que estableció esos estándares. Ahora los tiempos han cambiado y mi familia y yo vivimos en este país. Hay tanta confusión, mala orientación, conceptos erróneos y falta de comunicación que la sociedad siempre parece estar al límite. Si paras y te tomas un minuto, puedes sentirlo. Yo lo veo.
¿Qué pasó cuando los hombres eran hombres?
