La Prensa de Colorado Por Pastor Pedro H Gonzalez
El más cordial saludo amable lector de La Prensa de Colorado. 
Hemos venido tratado temas de mucho interés orientados a que cada lector pueda vivir una vida más productiva y en la que las bendiciones del Dios altísimo se noten de manera contundente para gloria de Su nombre; para eso nos ha de servir la palabra de Dios y si no cumpliera ese propósito entonces sería inútil pero eso está lejos de la realidad y de la verdad, ya que la palabra de Dios es viva y eficaz y más cortante que espada de dos filos, eso es una garantía para nosotros, eso son buenas noticias para usted, déjeme le explico cómo.
Isaías 55:11 “Así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mi vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello que la envié.
Y yo creo que podemos ver que está hablando el Dios creador que, de hecho hizo todo lo que vemos y lo que no vemos con Su palabra; por allá en Génesis vemos el poder de la palabra en acción cuando Dios dice: hagamos. Ahora bien, esa palabra esta hoy en boca de los hijos de Dios y sigue teniendo el mismo poder creador y creativo, y sigue llena de poder, y sigue igual de efectiva y aguda, recuerde que cielo y tierra pasaran más Su palabra no pasara.
Gracias a esta promesa hecha por el mismísimo Dios es que cada uno de nosotros sus hijos, tiene un don profético, la palabra de Dios en boca de uno de sus hijos, tiene el poder de volverse profética, ya que sigue siendo palabra de Dios y hemos visto que no volverá vacía, sino que será prosperada y alcanzará su objetivo. Para esto se requieren dos cosas, primero es conocer la palabra, relacionarse con ella, de nada sirve todo lo que está escrito en la biblia si no lo leemos, está allí para nuestra formación, para nuestra información y para nuestra ayuda, de ahí la importancia de leerla. Lo segundo es creerla, saber que es cierta, que tiene poder, que es viva, que produce cosas en la vida de los hijos y que podría cambiar de plano sus circunstancias ahora mismo si usted se atreve a hablarla con la seguridad de estar emitiendo un poder creativo que sale de su boca.
2 Corintios 4:13 dice: Pero teniendo el mismo espíritu de fe, conforme a lo que está escrito: Creí por lo cual hable, nosotros también creemos por lo cual también hablamos.
Esto que acabamos de leer es muy poderoso y podrá marcar la diferencia entre una vida victoriosa y una vida en fracaso. Sus palabras hablan de lo que usted cree.
Cuando yo hablo con una persona puedo identificar rápidamente el tipo de vida que vive, sus palabras le delatan. Hay quien habla de sí mismo para
muerte, todo lo que sale de su boca es trágico, escaso, amargo, negativo; esa persona cree en ese tipo de vida, lo habla y lo vive, siempre vivirá de esa manera, para aquel siempre faltara algo, él está viviendo el producto de lo que sale de su boca porque él cree en todo aquello que habla y lo que cree lo vive.
Hay por el contrario quien habla bien de su vida, siempre está esperando algo más, siempre busca el lado bueno de la vida, se sabe amado por el Dios de la creación, sabe que en el habita el poder creador de la palabra, cuida su lenguaje, ha entendido que su lenguaje de hoy le está dando forma a su día de mañana.
El primero habla de las circunstancias que está viviendo y la perpetua, el segundo habla de las circunstancias que quiere vivir y disfruta de lo que habla. Son dos personas viviendo en el mismo planeta, con las mismas posibilidades, pero con lenguaje distinto y con resultados distintos desde luego.
Cuando uno va al médico es casi normal que el médico le pida abrir la boca y él va a revisar la lengua, allí encontraran señales de patologías que podrían estar afectando al paciente. Cuando yo oigo hablar a alguien puedo saber cómo está la vida de esa persona, es fácil diagnosticarlo, es cuestión de oírle hablar.
Quiero preguntarle hoy de manera directa y franca, en el amor y con el objetivo de hacerlo consciente de una realidad, usted está moldeando lo que vive por medio de lo que habla.
La pregunta es: ¿Cómo está su lengua? Proverbios 18:21 dice: La muerte y la vida están en poder de la lengua, y el que la ama COMERA de sus frutos. (El acento es mío) pero así es en realidad, usted y yo comemos de lo que hablamos así que no se queje más de lo que vive y empiece a modificarlo que habla.
Puede que no todo lo que salga de su boca sea malo, pero me he ido al extremo solo para hacerle caer en cuenta que nuestra lengua tiene una cierta enfermedad que debe ser curada, algunas veces que usted hable muerte o escasez o enfermedad bastaran para tenerle postrado en situaciones que no tendría por qué vivir si no fueran habladas. Modifica r su lenguaje lograra modificar su vida, créame lo vivo a diario.
Si no me quiere creer a mi está bien, pero créale a la biblia, al fin de cuentas ella es la que le ha hablado hoy no yo.
Soy el Pastor Pedro H. Gonzalez de la Iglesia Embajada del Reino.
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Le esperamos.
