El impeachment en
los Estados Unidos
El impeachment, puede traducirse en español como la acusación o impugnación formulada en contra de una persona que ostente un alto cargo público, el también llamado juicio de desafuero o juicio político, es el inicio a un proceso de revocación o destitución de mandato, cuando este servidor público haya cometido delitos en el desempeño de sus funciones y tiene como propósito principal, resguardar la responsabilidad que tienen los altos funcionarios públicos frente a las leyes y sus gobernados.
En los Estado Unidos esta figura jurídica está contemplada en el artículo primero de su Constitución, la cual contempla que los altos funcionarios pueden ser procesados por mandato de la Cámara de Representantes acusados por delitos graves, siendo el Senado el encargado de llevar a cabo dicho juicio y de emitir su veredicto con las dos terceras partes de los votos.
Históricamente en los Estado Unidos han existido catorce procesos de destitución, de los cuales cuatro acabaron en una resolución condenatoria. Solo los Presidentes Bill Clinton en 1998 y Andrew Johnson en 1868 fueron procesados obteniendo absolución; por su parte el Presidente Richard Nixon interrumpió dicho proceso legal al renunciar a su cargo en el año de 1974.
Actualmente, la Cámara de Representantes de los Estados Unidos ha iniciado una investigación de impeachment en contra del actual Presidente Donald Trump, bajo los supuestos cargos de haber violado el juramento propio de su cargo y el incumplimiento a sus obligaciones, que como máximo jerarca tiene establecidas en su Constitución. Lo anterior, después que un informante revelara un contacto telefónico entre Trump y el régimen ucraniano, a fin de conseguir información privilegiada con propósitos políticos respecto de los negocios del candidato presidencial demócrata Joe Biden y su hijo Hunter en Ucrania.
Los Congresistas están tratando de indagar si el Presidente Trump suspendió unos US $400 millones de dólares para ayuda a Ucrania a cambio de que este país investigara a Joe Biden, quien esta postulado a la nominación presidencial demócrata para contender en las elecciones en el 2020.
El Presidente Trump y sus correligionarios creen que Biden padre usó su posición como vicepresidente de Barack Obama para obligar a Ucrania a descartar una investigación sobre una compañía de energía ucraniana, en la que supuestamente podría haber implicado a su hijo en actos ilícitos y aunque estas acusaciones no han sido debidamente comprobadas, el PresidenteTrump solicito al Presidente Ucraniano Volodymyr Zelensky, que investigara a Biden.
Ante esta circunstancia, la Casa Blanca se ha declarado formalmente en contra del “impeachment”, negándose por parte de su presidente a cooperar con la investigación, alegando acusaciones carentes de fundamento y constitucionalmente inválidos, circunstancia que ha obligado a la líder demócrata Nancy Pelosi y actual Presidenta de la Cámara de Representantes a señalar que nadie está por encima de la ley.
Por su parte la abogada de la Casa Blanca, Pat Cipollone, envió una carta de ocho páginas a la presidenta de la Cámara y líder demócrata, Nancy Pelosi, y a los tres presidentes de los comités demócratas, acusando a sus líderes de violar la justicia fundamental y el debido proceso constitucional, toda vez que no se realizó una votación para iniciar la investigación.
Se cree que la aparición de un segundo informante podría ser clave para los demócratas que buscan hablar con alguien que haya presenciado la llamada directamente o tenga más información al respecto, por lo que si la Cámara de Representantes vota a favor del impeachment, el Senado se verá obligado a celebrar un juicio.
La moneda está en el aire, solo falta esperar que suceda.