Por Pastor Pedro H Gonzalez
2 Corintios 4:13 Pero teniendo el mismo espíritu de fe, conforme a lo que está escrito: Creí por lo cual hablé, nosotros también creemos, por lo cual también hablamos. Estoy convencido de que cada verdad que trae la biblia es infalible y absoluta, sin embargo también defiendo la postura de que no toda verdad bíblica es una verdad presente, es decir una que se puede usar para los hijos en este tiempo.
Lo digo porque lo que ocurrió en la cruz nos dio una posición tal que no podemos desconocer, y si recitamos la biblia sin un correcto entendimiento es decir apegados al propósito para el cual fue escrita nos perdemos la sustancia de lo que se escribió.
Una fe correcta da como resultado un vivir correcto, es decir una expresión correcta de la fe. Todo ser humano aplica este versículo que leímos, lo que ocurre es que no todo ser humano cree lo mismo y como tal no toda declaración, no toda palabra habla de lo mismo, no toda palabra o todo lo que se habla da el mismo resultado.
Empecemos por definir la fe y según la biblia que es el libro más autorizado para hablar de fe, esta es la certeza de lo que se cree, la convicción de lo que no se ve.
Suponga que una persona va al médico y el médico le dice: Mi amigo, me temo que según sus síntomas usted padece una grave enfermedad, habrá que hacer algunos exámenes pero lo más probable es que si resulta como me temo, a usted le quedan pocos meses de vida.
Esa persona llega a la casa y su familia pregunta cómo le fue? La persona ha creído al médico y dice: Me quedan pocos meses de vida. Creyó por lo cual hablo.
Lo que quiero llevarlo a reconocer es que todo lo que creemos genera una expresión verbal y una expresión vivencial, es decir un estilo de vida.
La persona del ejemplo hipotético, ya una vez que ha creído que tiene poco tiempo de vida, entonces va a empezar a vender sus cosas, hacer arreglos para su entierro, probablemente su estado de ánimo cambia, tornándose triste a quizás se haga extrovertido tratando de vivir en unos meses lo que no vivió en toda su vida.
Lo cierto es que lo que ha creído cambiará su expresión y su estilo de vida.
Nadie escapa a esa verdad bíblica, todos hablamos de acuerdo a lo que creemos.
Lo ideal entonces para los hijos de Dios es que empecemos a hablar de acuerdo a lo que creemos, y que es eso?
Creemos que un hombre murió por los pecados de todos, creemos que se entregó por amor a la humanidad y de esa manera nos redimió, creemos que en El somos mas que vencedores, que la obra ha sido terminada con éxito y que no hay batallas pendientes que pelear, todo eso y mas lo dice la biblia, pero veo una triste realidad en los creyentes cristianos y es que aunque sabemos todo aquello que dice la biblia, nuestra declaración y nuestro estilo de vida no cambia.
Seguimos declarando muerte, fracaso, penas, tristeza, desconsuelo, un eterno ya casi, pobreza y todo porque en el sistema religioso están empeñados en anular al hijo victorioso que cree por lo cual habla, que habla y actúa en concordancia a lo que cree.
Hablemos de acuerdo a lo que está escrito; no es eso lo nos instruye la misma biblia? Yo creo en un mundo gobernado por Dios, creo en un mundo donde el amor prevalece, creo que ningún arma forjada podrá prevalecer contra la iglesia, creo que somos una raza de gente poderosa como nunca se ha visto en la tierra, creo en el poder del Espíritu Santo operando en cada hijo de Dios, yo creo y eso hablo.
Espero que usted empiece a hablar y actuar también lo que cree.
Soy el Pastor Pedro H. Gonzalez de la Iglesia Embajada del Reino.
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