La curación es un proceso. Ya sea que una persona se esté recuperando de una lesión física, dolor, fracaso o abuso, la curación es posible.
Todo abuso infantil es horrible. El abuso sexual infantil añade un elemento siniestro debido a la vergüenza que infunde a las víctimas. Los abusadores frecuentemente amenazan a sus víctimas, obligándolas a convertirse en campeones guardianes de secretos.
La combinación de vergüenza y miedo hace que sea fácil entender por qué no se denuncia. Los limitados datos disponibles muestran que se trata de un problema generalizado: aproximadamente una de cada cuatro niñas y uno de cada trece niños sufren abuso sexual infantil en algún momento de la infancia.
El abuso sexual infantil puede tener varios efectos duraderos y de amplio alcance, incluidos el trastorno de estrés postraumático, la depresión y la ansiedad.
Los problemas de confianza también son comunes entre los adultos que sufrieron abuso sexual infantil. Contrariamente a lo que mucha gente cree, más del 90 por ciento del abuso sexual infantil es perpetrado por alguien que el niño o su familia conoce y en quien confía. Debido a que el abuso sexual infantil está envuelto en secreto, la capacidad de confiar puede verse destrozada.
El impacto del abuso sexua
infantil en la edad adulta
Muchos adultos sobrevivientes de abuso sexual infantil continúan teniendo relaciones sanas y vidas plenas. En la mayoría de los casos, son personas que tuvieron la suerte de contar con el apoyo de sus pares, ayuda profesional y padres compasivos que les creyeron cuando revelaron el abuso o una combinación de esas cosas.
Además de muchos efectos emocionales y psicológicos del abuso sexual infantil, también puede manifestarse físicamente. Las investigaciones muestran que las personas con antecedentes de abuso sexual infantil tienen un mayor riesgo de sufrir problemas gastrointestinales funcionales, dolor ginecológico, síntomas cardiopulmonares, abuso de sustancias y conductas sexuales de riesgo.
La curación comienza
con el reconocimiento
Los adultos sobrevivientes de abuso sexual infantil pueden verse tentados a reprimir los recuerdos para que puedan funcionar. Es comprensible no querer revivir un pasado traumatizante. El peligro es que los desencadenantes internos y externos resultantes del abuso puedan seguir impactando sus vidas.
Cuando los supervivientes rompen su silencio, otros se dan cuenta de que no están solos. Muchos sobrevivientes han descubierto que reconocer lo que les sucedió y compartir sus experiencias puede ser fundamental en el proceso de curación.
El grupo de apoyo comunitario para sobrevivientes de EndCAN, Louder than Silence, a través de Inspire, es una comunidad en línea gratuita de grupos de apoyo donde las personas pueden sentirse seguras, ser auténticas mientras comparten sus experiencias de forma anónima y aprenden de otras personas que “han estado allí”.
El proceso de recuperación de cada persona es único. No existe un orden definido, un cronograma único o un camino hacia la recuperación para todos.
13 etapas de curación
del abuso sexual infantil
- La decisión de sanar. Una persona debe estar preparada y dispuesta a realizar cambios para comenzar el proceso de curación. Este paso frecuentemente comienza cuando te das cuenta de que los efectos del abuso sexual que sufriste cuando eras niño están teniendo un impacto significativo en tu vida.
- La etapa de emergencia. En esta etapa, comienzas a lidiar con recuerdos y sentimientos que han estado reprimidos durante mucho tiempo. Es posible que experimente una avalancha de emociones y, en ocasiones, dolor físico.
- Recordando el abuso. Esta etapa puede ser desgarradora a medida que recupera recuerdos y sentimientos sobre su abuso. Empiezas a comprender las muchas formas en que el abuso sexual ha impactado tu vida.
- Reconocer que sucedió. Enfrentar el hecho de que sufriste abuso sexual cuando eras niño sigue recordando tu abuso. Salir de la negación y llegar a la verdad es un paso poderoso para muchos sobrevivientes.
- Rompiendo el silencio. Hablar sobre su abuso puede ser muy curativo. Compartir tu historia con alguien que realmente se preocupa por ti puede ser difícil, pero puede ayudarte a comenzar a sentir tu fuerza, resiliencia y coraje. A veces, revelar la verdad debe hacerse mediante un enfoque menos directo, como por ejemplo mediante la escritura o el arte.
- Entendiendo que no fue tu culpa. No es raro que los niños crean que el abuso fue culpa suya. Parte del proceso para un sobreviviente adulto es aprender a devolverle la responsabilidad a su abusador.
- Comprender al niño víctima. Permitirte tener empatía y compasión por tu “niño interior” es una etapa que te permitirá comenzar a sentir una conexión con él. Puedes cuidar a tu niño interior y protegerlo.
- Lamentando el abuso. Como adulto sobreviviente de abuso sexual, tienes mucho que lamentar. El duelo le brinda una manera de honrar su dolor, liberarlo y vivir más plenamente en el presente sin quedarse estancado en el pasado.
- Enojo. Esta etapa es una oportunidad para utilizar su ira como catalizador para superar su dolor, dolor y desesperación. Es un paso importante para liberar la ira que has reprimido.
- Divulgación y decir la verdad. Enfrentar a su abusador y hablar sobre su abuso con él puede ser empoderador, pero esta etapa no es para todos. Es esencial obtener el apoyo, la curación y la consulta adecuados antes de dar este paso si decide darlo.
- Perdón. Perdonarte a ti mismo te libera de la culpa, la vergüenza y la humillación. A algunas personas les resulta liberador perdonar a su abusador, pero esto suele ocurrir después de un proceso de curación largo y comprometido.
- Espiritualidad. Muchas personas descubren que el proceso de curación requiere fuentes de fuerza y apoyo más significativas, lo que las lleva a perseguir su espiritualidad.
- Resolución. A medida que continúe avanzando por las etapas, experimentará más conciencia, integración y compasión. Obtendrá la capacidad de avanzar hacia un futuro mejor.
No sufras en silencio. Obtenga apoyo, encuentre recursos valiosos y encuentre las herramientas que le ayudarán a sanar. Y cuando esté listo, comparta su historia para que otros adultos sobrevivientes de abuso sexual infantil sepan que tampoco están solos.