En una revelación sorprendente, la administración de Joe Biden ha admitido haber transportado migrantes en vuelos secretos hacia Estados Unidos, como parte de un controvertido plan para reducir el número de cruces en la frontera.
Según un informe original del periodista Todd Bensman, del Centro de Estudios de Inmigración, funcionarios de las agencias de inmigración de Biden han afirmado que revelar las ubicaciones exactas de estos vuelos podría exponer al país a vulnerabilidades en materia de seguridad nacional.
El informe detalla cómo la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) se ha negado a proporcionar información sobre un programa llevado a cabo el año pasado, en el que se organizaron vuelos secretos desde aeropuertos extranjeros hacia ciudades estadounidenses.
Este programa, que se mantuvo en secreto mientras un número récord de migrantes cruzaba la frontera sur, ha suscitado preocupaciones sobre la transparencia y la seguridad del país.
El método utilizado para estos vuelos secretos ha sido una aplicación para teléfonos celulares, conocida como CBP One, que ha permitido la llegada casi indetectable de 320,000 extranjeros sin derechos legales para ingresar a Estados Unidos.
La expansión de esta aplicación, iniciada por la administración Biden a principios del año pasado, ha permitido que los migrantes soliciten asilo desde sus países de origen y sean luego transportados en secreto a aeropuertos estadounidenses desde otros países.
Esta revelación surge en medio de una creciente controversia sobre las políticas de inmigración de la administración Biden.
En los últimos años, el gobierno ha enfrentado críticas por programas similares que han incluido el transporte de menores migrantes desde la frontera con México hacia otras ciudades de Estados Unidos.
Aunque los abogados de CBP han argumentado que revelar las ubicaciones de estos vuelos podría comprometer la seguridad nacional, los críticos sostienen que la falta de transparencia socava la confianza pública y plantea serias preguntas sobre la legalidad y la ética de estas acciones.
Los republicanos han exigido un mayor escrutinio y medidas más estrictas en la frontera sur, argumentando que la política migratoria de Biden ha fracasado en asegurar la frontera y proteger la soberanía nacional.
Mientras tanto, grupos defensores de los derechos de los migrantes han expresado su preocupación por el impacto humanitario de estas políticas, señalando que los migrantes pueden estar siendo sometidos a un mayor riesgo al ser transportados en secreto y sin acceso a protecciones legales adecuadas.
Es increible como han entrado miles y miles de migrantes ilegales con una simple aplicación y sin pasaporte, sin visa, sin nada completamente mientras otros han pasado por tanto sacrificio para conseguir una visa de turista…