González-Flores 
El llamado día histórico llegó. Millones de personas siguieron de cerca el discurso del Presidente Barack Obama, a través de las diferentes televisoras que pasaron en vivo el anuncio de las nuevas medidas ejecutivas, ante la falta de una reforma migratoria, y al menos por esta ocasión este plan beneficiará a unos 5 millones de indocumentados que viven en los Estados Unidos.
Desde el inicio del día había mucha expectación, nervios y fue la noticia que acaparó todas las redes sociales.
Y, finalmente se pudo conocer ya el tan ansiado plan de Obama, el cual impactará de manera positiva a los indocumentados que tengan hijos que son ciudadanos estadounidenses o residentes permanentes y como punto muy importante, que demuestren que llevan en EE.UU. desde antes del 1 de enero de 2010 y cabe señalar, que carecen de antecedentes penales.
De acuerdo a lo manifestado por el mandatario federal, las personas que califican para su acción ejecutiva, evitarán la amenaza de la deportación por un lapso de cinco años y obtendrán un permiso de trabajo.
Para acogerse al nuevo programa para padres con niños estadounidenses o residentes permanentes, los potenciales beneficiarios deberán demostrar que su hijo nació antes del anuncio del presidente y que llevan en el país al menos cinco años.
En cuanto a DACA, que ha evitado la deportación de más de 580 mil jóvenes indocumentados desde agosto de 2012, hasta ahora dos de los requisitos básicos eran ser menor de 31 años y haber entrado en el país antes del 15 de junio de 2007.
De acuerdo con la Casa Blanca, con las medidas ejecutivas de Obama ese programa beneficiará ahora a todos los jóvenes que llegaron a Estados Unidos antes de cumplir 16 años y con anterioridad al 1 de enero de 2010, con independencia de la edad que tengan actualmente.
Obama, quien se mostró serio, vestido elegantemente de negro, camisa blanca y corbata morada, describió sus acciones como un enfoque sensato porque “la amnistía masiva sería injusta” y “la deportación masiva sería a imposible”.
También y no a manera retadora, se refirió a los republicanos, sobre todo en aquellos que cuestionen su autoridad, a que mejor actúen en materia migratoria para que aprueben una ley que otorgue soluciones permanentes al sistema migratorio.
“Para aquellos miembros del Congreso que cuestionan mi autoridad para hacer que nuestro sistema de inmigración funcione mejor, o cuestionan mi capacidad de actuar donde el Congreso ha fallado, tengo una respuesta: aprueben una ley”, dijo y espacio que fue resaltado en las diversas informaciones que salieron inmediatamente que terminó el discurso el Presidente Obama.
Además, Obama dijo que ordenaba a las autoridades de inmigración a que deporten a los delincuentes y no a las familias. Un elemento clave es su plan para instruir a las autoridades inmigratorias para priorizar la expulsión de miembros de pandillas, delincuentes y sospechosos en vez de indocumentados que cumplen la ley y que son padres de ciudadanos estadounidenses.
Elementos de su
acción ejecutiva:
* Padres
Se protegerá de deportación y se permitirá dar autorización laboral a aproximadamente 4.1 millones de personas que se encuentran ilegalmente en Estados Unidos pero cuyos hijos sean ciudadanos estadounidenses o residentes permanentes, independientemente de si los hijos son menores de edad. Para ser elegibles, los padres tienen que haber vivido en el país por mínimo cinco años.
* Hijos
Se ampliará el programa de suspensión de deportaciones que Obama lanzó en el 2012 y que exime de deportación a inmigrantes que fueron traídos cuando eran niños a Estados Unidos de manera ilegal hasta el 2007. Ahora se ampliará para abarcar hasta el 2010, y se levantará la restricción de que los beneficiarios deben tener por lo menos 31 años de edad. Se estima que unas 250,000 personas podrían quedar beneficiadas.
* Prioridades para deportaciones
Baja la prioridad para deportar a padres de ciudadanos estadounidenses o de residentes permanentes que tengan menos de cinco años en el país, y para otros que tengan más de 10 años en el país. La nueva política dará prioridad a la deportación de criminales peligrosos y de gente que cruzó la frontera ilegalmente en tiempo más reciente.
También fue claro que ninguno de estos cambios beneficiará a personas que acaban de llegar a los Estados Unidos, quienes dijo, constituyen una alta prioridad para deportaciones, por lo que se debe desestimar la noción de que exista una nueva ventana de oportunidad.
“La frontera va a ser un lugar más seguro como resultado de estos esfuerzos. La gente debe entender que será más difícil ingresar, habrá más detenciones y deportaciones, en especial para quienes quieran repetir poner a sus hijos en manos de un contrabandista, como lo vimos este verano con niños de Centroamérica”, advirtió.
