La Prensa de Colorado 
Por Pastor Pedro H Gonzalez
Es bueno tener fe, de hecho es una de las mejores cosas que una persona puede experimentar en la vida. La gente de fe tiene una ventaja competitiva frente a aquel que va por la vida sin más fe que aquella que pueda tener en sí mismo.
Algunos pueden pensar de la fe como algo religioso pero nada más lejano de la verdad, la fe no es sinónimo de religión. Muy por el contrario la persona de fe auténtica y verdadera, se ha alejado de toda práctica religiosa y ha entrado en un campo de identidad con Dios, que el religioso jamás podrá alcanzar.
La religión es el acto humano de querer alcanzar a Dios mediante habilidades propias, conceptos propios, prácticas propias, la religión es pretender encasillar a Dios a un molde humano y eso jamás podrá ser. La fe por el contrario, se usa del conocimiento de Dios y de su palabra para entenderlo y empieza a descubrir cosas tan llenas de amor como que somos hechos a Su imagen y conforme a Su semejanza.
Pasamos a descubrir que ya no tenemos necesidad de rituales para estar en su presencia, sino que su presencia va a donde quiera que estemos porque Él nos habita.
Empezamos a conocer desde la maravillosa forma de amar del Padre eterno, ya no lo vemos distante, ya no lo tememos con temor del castigo sino que lo que tememos es estar alguna vez distanciados o separados de Él, pero entonces somos notificados que nada nos podrá separar del amor del Padre.
La fe correcta, la que nos separa de la religión, empieza por entender que de tal manera nos amo que entregó a su hijo para que Él pudiera encontrar o formar un cuerpo mediante el cual impartirse para seguir expandiendo su Reino.
Ese tipo de fe, no necesita alcanzar victoria, porque en ese tipo de fe la victoria nos alcanzó ya, y es que ese tipo de fe entiende que la victoria es Cristo, de ahí que podemos decir que, en Cristo somos mas que vencedores.
Esa fe sabe que todas las bendiciones ya nos fueron dadas luego entonces no anda buscando bendiciones sino que lo que busca es bendecir desde la posición de bendecido.
Dejare unos versículos para que el que lee, entienda.
Efesios 1:3 Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Senor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo.
Gálatas 3:14 Para que en Cristo Jesus la bendición de Abraham alcanzase a los gentiles a fin de que por la fe recibiesemos la promesa del Espíritu.
Solo algo más, la bendición de Abraham es tierra, linaje, fama y protección. Esa bendición es la que nos alcanza, le repito, nos alcanza, no nosotros a ella, pero solo ocurre si no estamos en Cristo Jesús, por eso también somos informados que Cristo en nosotros la esperanza de gloria.
Cierro aquí mi caso esperando que alguien pueda entender las palabras de Dios el Padre para Abraham luego de darle sus promesas: Te bendecire y seras bendicion.
Ciertamente somos bendecidos pero para bendecir.
Soy el Pastor Pedro H. Gonzalez de la Iglesia Embajada del Reino.
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