Los Broncos de Denver iniciaron su temporada con una victoria cardiaca 24 a 21 sobre los Chargers de Los Ángeles, el encuentro terminó con unde “Deya Vu”, fue casi una copia al carbón de como comenzaron su temporada pasada, aquel día fueron las Panthers de Carolina las víctimas.
El héroe del encuentro fue Shelby Harris quien bloqueó el gol de campo que hubiera mandado el encuentro a tiempo extra, esto después de que
su entrenador congelara al pateador unos instantes antes.
Los Broncos tuvieron tres cuartos de ensueño donde todo les funcionó y acumularon los 24 puntos producto de tres viajes a la zona de anotación y un gol de campo, pero el último cuarto se les complicaron las cosas con algunos errores que les dio 14 puntos a los de Los Ángeles. Esto producto de una intercepción y un balón suelto y un gol de campo fallado por Brandon McManus quien por cierto ese día por la mañana había recibido una extensión de contrato que lo liga al equipo por algunos años más.
Trevor Siemian quien es el mariscal de campo de los Broncos tuvo una noche casi perfecta con un control excelente de su ofensiva y mostrando una nueva cara al acarear el ovoide en algunas jugadas claves del encuentro esto después de una primera serie que no mostro mucho.
Pero en su segunda posición llevó a su equipo 70 yardas en 13 jugadas que terminó con un pase de 5 yardas a Bennie Fowler, los siguientes 7 puntos llegaron en el segundo cuarto después de una gran devolución de despeje de Isaiah McKenzie de 31 yardas que dejó en tremenda poción a su ofensiva, la cual terminó el trabajo 4 minutos y 38 segundos después en un acarreo de una yarda de Siemian.
En el tercer cuarto llegaron otros 10 puntos, este producto primero de otra serie ofensiva que terminó en la zona prometida con otra conexión Siemian & Fowler, está de 6 yardas y con un gol de campo de 20 yardas de McManus.
En el último cuarto fue cuando se complicó el encuentro para los de la Milla Alta, primero con la intercepción, la cual fue una mezcla de suerte y ayuda de los oficiales ya que claramente se vio cuando el defensivo de los Chargers cometió una falta que después terminaría en las manos de su compañero.
Después llegó un balón suelto que fue por conducto de Jamaal Charles. Las dos oportunidades las aprovechó con maestría Philip Rivers, mariscal de campo de los visitantes quien en pocos minutos lanzó un par de pases de anotación que puso el juego en un estado de ebullición.
Rivers, a pesar de tener el momento del encuentro al final, no pudo con la defensa de los Broncos la cual lo había dominado durante los primeros 3 cuartos y en la serie definitiva lo detuvieron, claro él sabía que su pateador lo podía mandar a tiempo extra, pero se le apareció Shelby.
El siguiente encuentro de los Broncos es este domingo recibiendo a los Cowboys de Dallas.