¡FELIZ DÍA
DEL PADRE…!
Me han escuchado decir en más de una oportunidad que no he sido el mejor Padre del mundo y a pesar de que he tratado de serlo todavía no recibo mi premio del “Padre del Año”. Pero siempre he estado preocupado y he participado activamente en la educación de mis hijos, porque es el mejor legado que les he podido dejar. Estaremos todos de acuerdo que la mejor inversión para nuestros hijos es la educación; no importa cuánto tiempo tenemos que dedicarle, es por el bien de ellos. Con respecto a eso no tenemos elección. Pero podemos escoger cuándo usar ese tiempo. Podemos escoger usar ese tiempo a una edad temprana, cuando podemos formar en nuestros niños caracteres positivos y actitudes que les servirán en su vida adulta. O podemos escoger gastar ese tiempo después, para salvarlos de los problemas y travesuras en las que puedan meterse cuando son ya mayores. Definitivamente: usaremos el tiempo. Lo que depende de nosotros es cuando lo usemos que sea un “tiempo familiar”, divertido y que se quede grabado para siempre en la memoria de nuestros hijos.
Como padres ocupados que viven en el siglo 21 con toda la “tecnología” de punta y teniendo muchas demandas en nuestro tiempo “cibernético”, podemos escoger empujar lejos el problema. “Comienza a hacer tu tarea desde hoy en adelante”. “No te preocupes, el próximo año tendrás una buena
maestra”. “Haz tu tarea, o si no…” Algunos padres dirán cualquier cosa con tal de sacar este problema del camino y tener más tiempo para poder enfocase en lo que piensa que son cosas más importantes como ver la televisión, mandar mensajes a sus amigos o compañeros de trabajo y no dedicarle el tempo necesario para el futuro de sus hijos.
Mis queridos amigos(as), quiero dejarles cinco valores que debemos inculcar a nuestros niños, que les permitirán ser adolescentes y jóvenes responsables el día de mañana. Ser parte de la formación de nuestros hijos es responsabilidad de nosotros y no de la escuela, de los maestros, los amigos, el pastor, el cura, la iglesia o la sociedad en que vivimos. Es la responsabilidad que nos dio el Creador, cuando nos bendijo con un hijo o hija y debemos cumplirla de la mejor manera posible.
Los cinco valores más importantes en la formación de nuestros hijos son:
1.-) Responsabilidad. “Si ha de ser, depende de mí”. Enseñar e insistir que su hijo(a) aprenda a tener responsabilidad de sus propias acciones. Que no culpen a otros de sus errores; que desde pequeños se hagan cargo de lo “bueno y malo” que hacen en su vida.
2.-) Auto Estima Positiva. Esto se construye demostrando amor y dedicando un tiempo exclusivo para ellos; repitiendo lo importante que son para sus padres y compartiendo actividades que demuestren al niño(ña) lo importante que son para sus padres.
3.-) Discriminación de la Historia/Interpretación. Deben enseñar a su hija(o) a entender la diferencia entre la historia real, lo que pasó realmente, y la interpretación que ella o él había dado a lo sucedido. Muy a menudo, nuestra interpretación nos afecta más que la propia historia, por esa razón hay que explicar la diferencia.
4.-) Tratar un Problema. Enseñar a los niños(as) lo importante que es tratar un problema cuando es pequeño, en lugar de permitir que se convierta en algo que ya está fuera del alcance de nuestras manos y soluciones. Solucionar el problema a penas aparezca les enseña a solucionar sus problemas solos y sin ayuda.
5.-) Confianza. Los niños(as) deben aprender que, cuando se haya comportado mal, puede confiar en sus padres y convertirlos en sus confidentes. No enojarse y escuchar su explicación primero y luego explicar “dónde” estuvo lo malo que realizó. Disciplina con amor no solo mantiene una buena relación “Padres-Hijos”; sino que “enseña” el amor de sus padres por ellos es incondicional y que no necesita ir a buscar ese apoyo en otra parte.
Pruébelo. ¡Funciona……….!
Feliz Día del Padre