Extracto del libro
“Los Principios y el Poder
de la Visión”
Por Dr. Myles Munroe
E l principio número nueve es que debemos reconocer la influencia que la gente tiene en nuestras visiones. Necesitamos a las otras personas si es que vamos a ser exitosos en la vida, porque, tal y como yo lo enfaticé anteriormente, no fuimos creados para realizar o cumplir nuestra visión solos. A propósito, Dios dijo específicamente acerca de Su primer ser humano que El creó, “No es bueno que el hombre esté sólo” (Génesis 2:18). Necesitamos a las otras personas si es que queremos tener éxito en la vida.
Otra vez, el propósito individual siempre se realiza dentro de un propósito más grande o dentro de un propósito corporativo. Por lo tanto, es muy importante que trabajemos con otros para poder hacer de nuestros sueños o visiones una realidad.
Debes recordar que Nehemías reportó, “Entonces les dije: Vosotros veis la mala situación en que estamos, que Jerusalén está desolada y sus puertas quemadas a fuego. Venid, reedifiquemos la muralla de Jerusalén para que ya no seamos un oprobio” (Nehemras 2:17 se añadió énfasis).
Nehemías fue quien había recibido la visión, pero él tenía que ir con otras personas para que lo ayudaran. Para cualquier visión que tú tengas, Dios ya tiene gente preparada para trabajar contigo, y ellos van a ser una bendición para ti.
Siempre va a existir la necesidad de tener gente positiva en tu vida.
Cuando yo fui a la universidad, yo tuve el sueño de graduarme, y hubieron personas que habían sido separadas para ayudarme a realizarlo.
Algunas de ellas me ayudaron académicamente, otras me ayudaron financieramente, otras me animaron a caminar espiritualmente. Cuando tú tienes un sueño o una visión, esta es la forma como funciona. Siempre va a haber gente ahí, esperando poder ayudarte. Por lo tanto, si tú no tienes ningún sueño o visión, y si tú no comienzas a actuar en ello, la gente que está supuesta a ayudarte no va a saber dónde encontrarte.
Tú te conviertes en aquellos con quienes tú pasas tu tiempo.
El principio de la influencia tiene una aplicación en dos sentidos, debido a que la gente puede tener un efecto negativo, así como un efecto positivo en nosotros. Cuando tú comienzas a actuar en tu visión, vas a incitar tanto a aquellos que te quieren ayudar como a aquellos que te quieren detener.
La Ley de la Asociación
La !ey de la asociación establece y determina que tú te conviertes en aquellos con los que tú pasas tu tiempo. Frecuentemente, menospreciamos la influencia de otros en nuestra vida. Hay dos palabras que describen precisamente la influencia: poderosa y sutil.
Frecuentemente, tú no sabes que estás siendo influenciado hasta que es demasiado tarde. Ya sea que tú te des cuenta de esto o no, la influencia de aquellos con los que tú pasas tu tiempo, tiene un efecto poderoso en la forma como tú vas a terminar en la vida, ya sea que tú llegues a tener éxito o que llegues a fracasar.
Lo que comúnmente llamamos como la presión de los compañeros, es simplemente lo siguiente: es la gente con la que nos asociamos y que está ejercitando su influencia sobre nosotros, tratando de dirigir nuestra vida en la forma como ellos quieren ir.
Deberíamos dejar de decirles a los jóvenes que sólo ellos tienen presión de sus compañeros. Los adultos también la tienen.
Los adultos encuentran muy difícil el poder ignorar la opinión de otras personas. Hay gentes que tienen sesenta, setenta u ochenta años de edad y que cedieron ante la presión de sus compañeros; casi todo el mundo es afectado por esto.
Tú debes tener mucho cuidado cuando tú permites ser influenciado, porque tu visión puede ser desarrollada o destruida por los demás.
Hay dos tipos de gentes en este mundo: aquellos que están contigo y aquellos que están en contra de ti. Yo he aprendido que la gente tiene el potencial de crear tu medio ambiente. Tu medio ambiente entonces determina tu forma de pensar, y tu forma de pensar determina tu futuro. Por lo tanto, tú debes escoger a tus amigos muy sabiamente, escogiendo a aquellos que están contigo y no a aquellos que están en contra de ti. Muéstrame a tus amigos, y yo te mostraré tu futuro.
Preguntas de Influencia
En general, tú deberías escoger amigos que van en la misma dirección en que tú vas y que quieren obtener las mismas cosas que tú quieres, de tal manera que se puedan reforzar el uno al otro. A la luz de esta verdad, yo quiero que tú te preguntes a ti mismo estas tres preguntas. Primero,u¿Con quién estoy pasando mi tiempo?” ¿Quiénes son tus amigos más cercanos; quién es la gente a la que tú le estás abriendo tu confianza?
Segundo, “¿Qué es lo que estas personas me están haciendo?” En otras palabras, ¿qué es lo que ellos te piden que escuches, que leas, que pienses y que hagas? ¿Hacia dónde te están dirigiendo ellos? ¿Qué es lo que ellos están haciéndote decir? ¿Con qué te están alimentando ellos? ¿En qué cosas están haciendo ellos que tú te comprometas? La última pregunta es una pregunta muy importante, porque tus amigos pueden hacerte sentir muy cómodo en tu miseria.
Lo más importante, ¿en qué te está convirtiendo a ti el hecho de estar con estas gentes? Salomón dijo, “El que anda con sabios será sabio, maselcompañero delos necios sufrirá daño” (Proverbios 13:20). La Versión Popular dice, “Júntate con los necios, y te echarás a perder”. Mi versión de este precepto dice, “Si tú quieres tener éxito, no estés en compañía deaquellos que no van a ningún lado en la vida”.
Escoge amigos que van en la misma dirección en que tú vas.
Por ejemplo, si tú te asocias con gente que gasta más dinero del que gana, hay muy altas probabilidades de que tú vas a acabar gastando más dinero del que ganas.
Una amiga te va a decir, “Acaba de salir ese nuevo vestido y esa es la última moda. Tú deberías comprártelo”, siendo que tú sabes que no tienes dinero para esto. Cuando ella dice, “Yo ya tengo el mío; ¿ya te compraste el tuyo?” tú verdaderamente te sientes presionada. Otro amigo, puede decirte, “Yo ya cambié mi automóvil por otro que es un último modelo.
Tú deberías hacer lo mismo. Tú tienes que verte bien, tú sabes”.
El resultado es que tú te sales completamente de tus objetivos-las mensualidades que tienes que hacer son tan altas que tú ya no puedes ahorrar ningún dinero. No permitas que nadie te saque de curso jamás. Decide por ti mismo, ¿Cuáles son misobjetivos y cuáles son mis planes? y no permitas que otros te influencíen para abandonarlos.
Tercero, pregúntate a ti mismo, ¿acaso lo que las otras gentes me están haciendo es una cosa buena con relación a mi visión? Cuando tú comienzas a decirle a la gente hacia dónde te diriges y qué es lo que vas a hacer, ellos (aun inconscientemente) comienzan a decir cosas para tratar de obstaculizar o impedir tu sueño o visión.
Tú necesitas preguntarte y contestarte estas tres preguntas a ti mismo en forma muy verdadera-yen forma regular-a medida que tú avanzas hacia tú visión.