“Continua latente una posible
huelga de los maestros;
advierten, sí habrá clases”
Luego de queque la Asociación de Maestros del Salón de Clases de Denver (DCTA, por sus siglas) votara a favor de irse a una huelga, por su parte, en una desus notificaciones más actualizadas, las Escuelas Públicas de Denver (DPS, por sus siglas) informaron que solicitaron la intervención del Departamento de Trabajo y Empleo de Colorado (CDLE, por sus siglas en inglés), para que sea esta entidad quien tome jurisdicción de la disputa de empleo entre DPS y DCTA antes del 28 de enero del presente año. De no ser así, que no haya un arreglo final, es muy posible que el último lunes de enero se haga efectiva dicha huelga.
Pero en información de último momento y publicado en la misma página oficial de DPS, se informa que “el miércoles solicitamos la intervención del Departamento de Trabajo para ayudarnos a alcanzar una resolución y que asuma la competencia al respecto, porque creemos que la huelga podría afectar a nuestras familias y a la comunidad de Denver”, al mismo tiempo de agregar que, DCTA compartió un comunicado oficial en el que decía que, hasta que el Departamento de Trabajo y Empleo de Colorado decida si intervenir o no, los miembros de DCTA no irán a huelga.
Esto significa que los maestros y proveedores de servicios especializados acudirán a su trabajo hasta que CDLE proporcione información actualizada.
De acuerdo a información oficial emitida por el mismo DPS y en su presentación ante el estado, describió cómo el potencial de una huelga de maestros en el distrito escolar más grande del estado sí afecta el interés público. Por ello, citó, por ejemplo, que la lista incluye la pérdida de tiempo de instrucción de parte de los maestros en huelga, la interrupción de la capacidad de los estudiantes para recibir alimentos y servicios de atención médica, así como crear una dificultad financiera para las familias de DPS.
“A los funcionarios del DPS también les preocupa que una huelga afecte sustancialmente el interés público, porque afectará profundamente la cultura de nuestras escuelas mucho después de que termine la huelga, incluso afectando la capacidad del distrito escolar para contratar maestros”, señaló el distrito escolar de Denver.
Asimismo, se mencionó que las Escuelas Públicas de Denver continúan pidiendo a la DCTA que regrese a la mesa y reanude las negociaciones.
Dentro de una de las informaciones vertidas por Susana Córdova, Superintendente de las Escuelas Públicas de Denver, daba a conocer que durante casi 15 meses se ha estado negociando con la Asociación de Maestros de Salones de Clases de Denver con respecto a la manera en que se remunere a los maestros y proveedores de servicios especializados (SSP, por su sigla en inglés, que incluye a enfermeros, psicólogos y trabajadores sociales).
“Con mucha desilusión, comparto con ustedes que anoche no logramos llegar a un acuerdo antes de que venciera el plazo. Nuestra última propuesta es generosa y competitiva, y garantiza que los maestros de nuestros estudiantes más vulnerables continúen siendo compensados por su labor en nuestras escuelas de mayor pobreza”, dijo Córdova.
Al mismo tiempo de agregar que “Mediante nuestra propuesta, asignamos $26.5 millones a la remuneración de maestros y ofrecimos un aumento promedio del 10% para nuestros maestros el próximo año escolar.
Esto además de los $33 millones que recibimos anualmente de los votantes de Denver para costear los incentivos de ProComp.
Para financiar esta propuesta, haremos recortes profundos en nuestros equipos de apoyo de la administración central, que sumarán más de $10 millones. Hacer estos recortes será difícil, pero creemos que es lo correcto para apoyar a nuestros maestros y proveedores de servicios especializados”.
El sindicato ha solicitado un aumento del 12.5 %. En comparación, el sindicato de Los Ángeles solicita actualmente un aumento total del 6.5 %, y los educadores de Pueblo solicitaron y obtuvieron un aumento total del 2 % luego de una huelga de una semana de duración.
El sindicato también ha pedido al Distrito que elimine los incentivos para los educadores de las escuelas con mayor índice de pobreza. “No abandonaremos nuestro compromiso de eliminación de la desigualdad de oportunidades. Atraer y retener a maestros excelentes y proveedores de apoyo especializado en nuestras escuelas de mayor pobreza es clave para nuestra estrategia.
Propusimos que los maestros de nuestras escuelas de mayor pobreza y los que desempeñan su labor en los puestos más difíciles de cubrir recibieran de $2,500 a $7,500 en servicios adicionales. Más del 70% de los maestros de DPS obtendrían al menos un incentivo de $2,500”, señala la información, que incluso se puede leer en la misma página oficial de DPS.