Venciendo los Obstáculos
para la Visión
Extracto del libro
“Los Principiosy el poder
de la Visión”
Por Dr. Myles Munroe
Algunas veces, sabemos lo que deberíamos estar haciendo, pero titubeamos para tomar el primer paso. Siempre tenemos la intención de hacerlo, pero nunca llegamos a hacerlo. Al contrario, lo que hacemos son excusas y pretextos, tales como, “Cuando mi vida no esté tan complicada como ahorita”, “Cuando sienta que tengo más confianza”, o “Después de que yo me ponga a orar un tiempo por eso”. Hay una historia de dos pescadores que se perdieron en medio de una tormenta en un lago.
La tormenta estaba soplando tan furiosamente que ellos no podían ver ninguna cosa. Uno de los pescadores dijo a su compañero, “Tenemos dos opciones. Podemos orar o podemos remar. ¿Cuál crees que debemos tomar?”
El otro pescador contestó, “¡Vamos a hacer ambas!” Esta es la manera como tú debes vivir. En lugar de pasarte todo el tiempo deliberando acerca de lo que tú necesitas hacer, sólo tienes que decir, “Vamos a remar”. Aun cuando tú te encuentres asustado, debes seguir remando.
Debes fijar un lugar de destino aun mientras tú estés orando, y Dios te va a guiar hacia dónde necesitas llegar.
Otro grupo de gentes que tienen problemas con llevar sus visiones hasta el cumplimiento final es lo que yo llamo “los iniciadores o comenzadores profesionales”.
Ellos siempre comienzan algo, pero nunca terminan nada. Por ejemplo, tienen libros que nunca han terminado de leer, sin embargo, ellos siguen comenzando a leer nuevos libros.
Nada en el mundo se siente mejor que el hecho de leer un libro desde el principio y hasta la última página, porque entonces, tú sabes que ese libro ya está dentro de ti y que nadie te lo puede quitar.
Todo lo que tú dejas a medias y sin terminar te va a desalentar para que no termines otros proyectos. Todo aquello que está pendiente de terminar tiene una forma y una oportunidad para poder perseguir tu vida.
Buscando el “Equilibrio”
Algunas personas no quieren enfocarse en un objetivo específico porque temen que su vida no esté bien balanceada. Ellos dicen cosas como estas: “Yo no quiero hacer nada en particular porque si 10 hago, vaya estar cerrando otras opciones que tengo. No quiero cerrar mi perspectiva”, o “Si me dedico muy en serio a hacer algo, tal vez me voy a perder de lo que realmente quiero hacer en la vida”.
El problema está en que la gente va a decir cosas como estas durante cuarenta y cinco años, iY van a terminar por no hacer nada! Lo que ellos llaman una búsqueda de equilibrio es realmente una excusa para no tener que tomar una decisión.
Ellos terminan siendo personas mediocres, las cuales son muy comunes y corrientes.
¿Acaso estás dedicado a una visión que es mucho más grande que tu vida?
El verdadero equilibrio consiste en mantener el equilibrio mientras que uno se mueve hacia el destino final u objetivo. Un buen ejemplo de esta verdad es la forma como funciona un barco en el océano. El barco necesita mantener siempre su equilibrio.
¿Acaso no sería un desperdicio de su precioso tiempo y de su combustible, el hecho de que un barco usara toda su energía sólo para tratar de mantener su equilibrio en el agua para no voltearse? Algunas personas viven sesenta y cinco años, setenta y cinco años, noventa años, sólo tratando de mantener el equilibrio. Pero el equilibrio no es el objetivo en sí mismo.
\Un barco mantiene el equilibrio a medida que se dirige a cierto destino específico. De la misma manera, nosotros necesitamos tener un destino mientras que mantenemos el equilibrio en nuestra vida.
Tratando de Hacerlo Todo
Una razón muy común por la cual las gentes no son específicas con relación a sus visiones es porque ellos están tratando de hacer muchas cosas.
Su problema no es el hecho de que estén indecisos para empezar algo, sino que andan por todos lados haciendo muchas cosas.
Y aunque siempre están construyendo algo, de hecho, no están acabando nada, porque nunca acaban de hacer nada de lo que comenzaron.
¿Por qué sucede esto? Porque la mayoría de la gente comete el error de creer que la meta principal en la vida es mantenerse ocupados. Esta forma de pensar es una trampa.
Las muchas ocupaciones no equivalen al progreso; el hecho de mantenerse muy ocupado no quiere decir necesariamente que tú te estás dirigiendo hacia un destino específico.
Yo he aprendido esta verdad tan importante que me ha liberado por completo tanto de la indecisión, como de la mucha ocupación ineficiente e inútil: Yo no fui creado para hacer todas las cosas. Esta declaración es algo muy bueno como para ponerlo en la pared de tu oficina o en el calendario de tu casa.
Cuando tratamos de apuntar la mira a todas las cosas, generalmente acabamos por no darle a nada. Pero la mayoría de nosotros nos estamos rompiendo el cuello, tratando de darle a todo lo que se atraviesa por nuestra vista. Déjame asegurarte algo: Tú no naciste para suplir todas las necesidades que hay sobre la tierra.
Es muy fácil comenzar a preocuparse acerca de todos los problemas que encaramos en este mundo. La compasión no sólo es una cualidad muy admirable, sino que también es un elemento esencial de la visión.
Sin embargo, tú no puedes tratar de suplir todas las necesidades que te rodean, y al mismo tiempo, ser efectivo para poder ayudar a la gente.
Mientras más necesidad qui~ras suplir, menor será el grado de atención que vas a poder dedicar a cada necesidad en lo particular.