Tomás Menchaca En la semana 12 de la NFL, los Broncos de Denver recibieron en casa a los Dolphins de Miami en un juego clave para mantener el liderato de la división y mantenerse a sólo un juego de los Patriots, quienes están controlando la AFC.
Los del estado de la Florida aprovecharon al máximo los 10 días que tuvieron para prepararse y su entrenador Joe Philbin armó un plan de juego que le dio buenos frutos a la ofensiva, con drives de largo yardage y consumidora de reloj.
Todo esto puso a prueba al equipo de Denver, quienes mantuvieron la calma casi todo el juego, digo casi porque en el tercer cuarto después de que Peyton Manning llevó a su ofensiva 64 yardas en 13 jugadas, pero al llegar a la zona roja fueron detenidos, entró el pateador Brandon McManus quien falló un gol de campo de 33 yardas, con lo que algunos de sus compañeros perdieron la compostura en la banca a causa de la frustración de no poderle dar alcance a los de Miami, que en ese momento ganaban 21 a 17.
Enseguida los Dolphins tomaron el “ovoide”, fueron detenidos después de 8 jugadas en las cuales solo avanzaron 13 yardas, pero continuaron con su buen momento ya que provocaron un balón suelto en la jugada en la cual despejaron lo que les resultó en otros 7 puntos, después de un pase del mariscal de los del Sur de la Florida Ryan Tannehill a Jarvis Landry.
En el último cuarto fue cuando los Broncos se sacaron toda la frustración de los últimos 7 cuartos y anotaron 22 puntos, producto de un par de pases de anotación de Payton Manninig, el primero a Demaryus Thomas su tercero del encuentro, este incluyó conversión de dos puntos.
El segundo fue para Wes Welker, este pase fue después de que la defensa Azul Naranja interceptara (T.J.Ward) a Tennehil.
Los otros 7 puntos de los Broncos fueron en una corrida de C.J.Anderson, quien tuvo un día formidable en 27 acarreos y acumuló 167 yardas para un promedio de 6.2, esto fue en buena parte a su línea ofensiva que recibió una gran presión durante toda la semana por el ridículo de la semana pasada.
Al final los de Denver se llevaron la victoria 39 a 36 y ahora a prepararse bien porque el próximo domingo por la noche tendrán una batalla de poder a poder con los Chiefs de Kansas City, quienes por cierto también tendrán también 10 días para preparar este juego, además de que juegan de locales.
