La Prensa de Colorado 
Por Pastor Pedro H Gonzalez
Nos alegra saludarle de nuevo amado lector.
Hoy quiero referirme al privilegio que tenemos de estar viviendo este tiempo.
Se dice que cada 100 años el mundo vive una pandemia; y si esto es cierto entonces estamos en un tiempo histórico de privilegio, sobre todo porque esta pandemia es de unos niveles de mortalidad muy bajos.
De cada 100 personas afectadas solo dos van a morir, solo dos y sin embargo en la mente de cada persona hay un temor a la palabra como si el solo hecho de contraer el virus fuera equivalente a tener un diagnostico de muerte. Estoy seguro que el temor va a matar más gente que el virus como tal.
En este sentido los medios han hecho un trabajo fenomenal para esparcir e implantar el temor en las mentes de las personas, cada medio (exceptuando algunos entre los cuales está La Prensa de Colorado) se ha dedicado a traer malas noticias, cuadros apocalípticos acerca de esta situación y parece que han tenido éxito en poner al mundo bajo el imperio del temor.
Gracias a Dios por sus hijos, la iglesia de Cristo, que no se doblegan ante el temor, sin que quiera decir que baja la guardia y se expone de manera irresponsable.
Lo que no puede hacer la iglesia es descuidar el propósito para el cual fue establecida en la tierra.
Antes de ir a ese punto debo decir que la iglesia se compone de templos, habitación del Espíritu Santo que fueron escogidos desde antes de la fundación del tiempo por El Padre y que hoy día se mueven en el mundo como un ejército de obreros que tienen un propósito, ahora hablaremos de eso.
Dado el hecho tangible de que todo el que cree en el hijo es parte del cuerpo de Cristo llamado la Iglesia, y entendiendo que ese cuerpo tiene una cabeza y solo una que se llama Cristo Jesús nuestro Señor, entonces no tenemos otra salida que pensar buscando el entendimiento acerca de para que fuimos inscritos en el libro de la vida, en el cuerpo de Cristo, la Iglesia.
Efesios 3:10 “Para que la multiforme sabiduría de Dios sea ahora dada a conocer por medio de La Iglesia a los principados y potestades en los lugares celestiales”.
Romanos 8:19 “Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios”.
En esto dos versículos que no son los únicos que hablan del propósito de Dios en sus hijos, esta esbozada la tarea que nos es dada para este tiempo; conviene que nos enteremos, ya que esto nos hará reflexionar si estamos en el propósito o no.
Debo explicar que la creación se refiere a todo lo que fue creado por Dios, todo, y el texto nos indica que todo ello, está esperando la manifestación nuestra, la de los hijos pero los hijos parecen estar distraídos con tantas cosas que no manifiestan su naturaleza y mucho menos su propósito.
Mientras la iglesia no se apersone de su tarea el mundo seguirá a la deriva, de acuerdo al diseño de Dios la iglesia tiene la voz, la única voz a la que la creación responde, pero el problema es que la iglesia se ha dedicado a orar para pedir cosas, no para comandar acciones.
Moisés tuvo esta situación (en perspectiva) cuando el pueblo de Israel estaba siendo perseguido por el ejército más poderoso de esa época (el egipcio) y tenían frente a ellos el mar rojo.
El pide algo a Dios, pero Dios le responde: “Porque clamas a mí, dile a los hijos de Israel que marchen y tu alza tu vara y extiende tu mano sobre el mar y divídelo”. No se si podemos ver que el mar era un enemigo mas potente que el ejército egipcio y aquí Dios escoge el obstáculo mas portentoso para glorificarse.
Ya todos conocemos el resultado de esta situación, pero con lo que quiero que se quede es con el hecho de que Moisés hablo, y el mar obedeció, Moisés se manifestó como lo pedía Dios y el mar no tuvo alternativa, tenia que ceder.
Todo aquel que cree en Cristo como Señor tiene mucho mas poder en su voz del que tenía Moisés, ¿por qué? Porque tiene en sí mismo al Espíritu Santo, somos su morada, su templo y si lo entendemos entonces también entenderemos que ahora mismo, desde la posición de hijos podríamos estar manifestando lo que Dios quiere que sea manifestado.
Es mediante la guía del Espíritu Santo y gracias a Su iluminación que saldremos de cualquier situación. Solamente que creamos, y afinemos el oído espiritual a lo que Él está diciendo ahora.
Déjese usar, la tierra tiene su oído abierto ha para oírle a usted, la pregunta es: ¿tiene usted el oído abierto para la voz del Espíritu Santo? Solo piense ¿qué habría pasado si Moisés hubiese sido sordo? La historia de la humanidad seria distinta ¿no? Entonces, ¿podrá la iglesia de Cristo hacer la diferencia en este tiempo? ¿Podremos ser la diferencia?
Soy el Pastor Pedro H. Gonzalez de la Iglesia Embajada del Reino.
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