González-Flores Miles de estudiantes tomaron algunas de las calles principales de Denver, para marchar –protestar- y exigir al mismo tiempo una acción contra el uso
de las armas. El movimiento de los jóvenes fue sin disturbios, con orden y sin que las respectivas autoridades tuvieran que intervenir. Esta actividad se da a un mes de la masacre que sucedió en una escuela de Florida.
El momento prácticamente se dio en muchas partes de los Estados Unidos, como en Chicago, San Diego, Arizona, Los Ángeles, Denver, entre otros. Gritos que se lanzaron a los cuatro vientos como, por ejemplo:
“¿Qué queremos? ¡Control de armas! ¿Cuándo lo queremos? ¡Ahora!” … fueron uno de los más sonados y claros sobre su postura.
Un día antes a esta marcha, Tom Boasberg, Superintendente y Susana Córdova, Superintendente de las Escuelas Públicas de Denver, publicaron una carta en la página de Internet del distrito, en la cual además de destacar que “Esta semana se conmemora un mes del trágico tiroteo escolar que tuvo lugar el 14 de febrero en Parkland, Florida. Desde entonces, los estudiantes del país se han unido para manifestarse en contra de la violencia con armas y han planeado una protesta estudiantil nacional… Nuestra meta el miércoles –día de la marcha- es proveer espacios seguros para que los estudiantes puedan aprender y participar en estas importantes cuestiones, incluyendo comunicar sus opiniones de 
forma pacífica y respetuosa. Apreciamos su apoyo a la hora de garantizar la seguridad de nuestros estudiantes…”
En cuanto a Denver, un poco más de dos mil estudiantes participaron, de escuelas como Denver School of the Arts, CEC Early College, Strive Excel, George Washington, Evie Dennis Campus, Denver Green, Kunsmiller, entre otras más, y que como punto final fue caminar hacia el Capitolio Estatal.
