Tomás Menchaca Los Rockies de Colorado iniciaron su semana recibiendo a los Reds de Cincinnati en una serie de 4 juegos, la cual dividieron con par de victorias por bando.
Los Rockies se llevaron el primero con un marcador de 5 a 3, la victoria se la llevó el lanzador Jeff Hoffman al completar 7 entradas en las cuales solo permitió 4 hits y 3 carreras, fue su triunfo número 5. Por su parte, el cerrador Greg Holland se llevó su salvamento 27 y mantiene el paso que lo llevó al juego de las estrellas el cual se jugará en la cuidad del sol.
Hoffman al obtener su quinta victoria antes del juego de las estrellas impuso una marca en las grandes ligas junto a sus compañeros lanzadores novatos, Márquez, Senzatela y Freeland en obtener 5 o más victorias antes del clásico de media temporada.
La otra victoria de los Rockies en esta serie llegó el miércoles, también por marcador de 5 a 3. Aquí el ganador fue Jon Gray quien desde que regresó de la lista de lesionados a estado imbatible. En esta ocasión lanzó 5 entradas y dos tercios donde permitió 8 hits y 3 carreras a la ofensiva Pat Valaika impulsó tres carreras.
El viernes los de Colorado iniciaron una serie interligas de tres encuentros contra los Chicago White Sox en casa, ese día fue especial para el manager Bud Black ya que sus pupilos le regalaron su victoria número 700 en las mayores 51 de ellas con los Rockies, el resto con los Padres de San Diego el marcador fue de 12 a 4.
El lanzador ganador fue Germán Márquez quien completó 7 entradas en las cuales permitió 9 hits y tres carreras a la ofensiva, Nolan Arenado estuvo encendido y se fue de 5/3 con 5 carreras impulsadas y dos anotadas.
En el juego del domingo el cual fue de en honor de las fuerzas armadas, también fueron homenajeados los representantes de los Rockies en el juego de las estrellas al recibir delante de su afición sus franelas que vestirán en Miami. Estos fueron el tercera base Nolan Arenado, el jardinero central Charlie Blackmon, el segunda base D.J. Le Mahieu y el cerrador Greg Holland.
Ya en el juego, Kyle Freeland estuvo a punto de tocar la gloria al llevar el juego sin hit ni carrera hasta el último inning donde ponchó al primero que enfrentó, pero Melky Cabrera con un hit al jardín izquierdo le rompió el corazón al lanzador y a los 36541 espectadores que estaban de pie al final el marcador quedo 10 a 0.
