La Prensa de Colorado 
Por Pedro H. Gonzalez
El más cordial saludo a cada uno de nuestros lectores. Celebramos esta semana una de las fechas más importantes de nuestra fe cristiana, la resurrección de Jesus como el Cristo.
Todas las religiones tienen su dios y cada una de ellas clama la supremacía de esos dioses, pero así mismo cada una de ellas tiene dioses que murieron y cuyas tumbas están aún ocupadas por los despojos mortales de sus dioses. Solamente la tumba de Jesus es encontrada vacía y así continua. Mas aun sabemos porque la biblia lo dice, que El está sentado a la diestra del Padre y desde allí gobierna.
Lo más interesante es la confirmación de la omnipresencia de Cristo lo que no deja lugar a dudas respecto a su deidad.
El esta sentado a la diestra del Padre, también está en cada uno de aquellos que creemos en su nombre, ya que habita corporalmente en la iglesia que es su cuerpo y quien lo representa aquí en la tierra. Ese es el misterio que la iglesia aun no parece comprender y por lo tanto no puede vivir o manifestar.
La escritura nos enseña que la tierra será llena de la gloria de Dios pero por efectos de una mala interpretación se nos ha hecho ver que eso será un día lejano o cercano pero que no está aquí todavía; lo cierto del caso es que si es cierto que el habita en cada hijo, en cada persona nacida de nuevo, en cada ser humano que ha creído en su nombre, entonces también es cierto que su gloria (naturaleza) está en cada uno de nosotros, luego entonces, cada vez que uno de sus hijos se para en cualquier lugar, ese lugar se llena de la gloria del Padre, y de la gloria de su hijo.
Habacuc 2:14 Porque la tierra será llena del conocimiento de la gloria del SEÑOR, como las aguas cubren el mar.
Es necesario decir que cuando este versículo se escribió aún no había aparecido Jesus, todavía no iba a la cruz y como tal no había sido impartido en cada uno de sus hijos, por eso el versículo está escrito y conjugado en tiempo futuro, pero estando ya presente Cristo, hay un cambio de tiempo y desde luego un cambio de circunstancias, y esas nuevas circunstancia se inscriben en el marco del nuevo pacto, escrito con sus sangre derramada en la cruz, como esta descrito en la última cena en palabras del mismo Jesus según lo relata Mateo 26:28
Ya entrados en esta verdad es necesario decir que no debemos ni podemos vivir por debajo del estándar que el consiguió con su sangre, el es el mesías, el redentor, El nos libró del pacado y de la muerte, El versículo inmediatamente atrás citado, dice claramente que esa sangre se derramo para el perdón de los pecados, y sabemos que loque nos llevó a la muerte fue el pecado así que el poder de la sangre me libra del poder de la muerte y a ti también amable lector.
Definitivamente es tiempo de celebración porque como lo decía el Apostol Pablo: Si Cristo no resucito de los muertos, vana es nuestra predicación, vana también nuestra fe. Mas sabiendo y teniendo la certeza de su resurrección entonces tenemos una fe poderosa que debe hacer también poderosa nuestra predicación, ya que predicamos a un Dios vivo y Dios de vivos.
No me avergüenzo del evangelio porqué es Poder para salvación. Ese poder quiero manifestar, ese poder quiero predicar y en ese poder salvífico quiero vivir.
Le invitamos a cada lector a que se haga presente este domingo en cualquier congregación donde se predique el nombre de Jesus como el Cristo y a que sin demoras se decida a abrazar el nombre de Jesus como El Señor de su vida, que a partir de ahí no será la misma, si quiere darnos la oportunidad de conocerle, lo esperamos en la Embajada.
Un abrazo para todos y feliz semana de Pascua.
Soy el Pastor Pedro H. Gonzalez de la Iglesia Embajada del Reino.
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Le esperamos.
