• November 21, 2024

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Texas transportó a 41 inmigrantes a Denver

Texas transportó en autobús a 41 inmigrantes a Denver después de que los cruces fronterizos no autorizados cayeran en picado

Las llegadas a Denver también han comenzado a caer esta semana. El alcalde Michael Hancock calificó la medida de Texas como “teatro político”.

Un grupo de 41 migrantes que recientemente ingresaron a los EE. UU. llegó a Denver el jueves en un autobús alquilado por la División de Manejo de Emergencias de Texas (TDEM) bajo la dirección del gobernador de Texas, Greg Abbott.

A diferencia de miles de migrantes que han llegado a la ciudad desde fines de diciembre por sus propios medios, esta fue la primera llegada coordinada por otro gobierno estatal, según funcionarios de la ciudad de Denver.

No es la primera vez que el gobernador republicano alquila autobuses para migrantes. Desde 2022, Abbott envió autobuses de Texas a Washington, D.C., la ciudad de Nueva York, Chicago y Filadelfia. No está claro qué les dijeron los funcionarios de Texas a los inmigrantes transportados en autobús a Denver al llegar, pero un portavoz de TDEM dijo que los inmigrantes viajaron aquí voluntariamente.

Su llegada se produce días después de que Denver experimentara un aumento en las llegadas diarias que llevó a la ciudad a activar nuevamente su centro de operaciones de emergencia como lo hizo a fines del año pasado.

El aumento reciente en las llegadas  probablemente se debió a una combinación de clima primaveral y la expiración pendiente  del Título 42, la política COVID de la era Trump que permitía a los oficiales federales de inmigración expulsar rápidamente a los migrantes de regreso a México  antes  de solicitar asilo.

Algunos predijeron que la política que expira daría lugar a un número insostenible de cruces fronterizos, pero en cambio sucedió lo contrario. Los agentes fronterizos informaron una caída del 60 % en las detenciones a lo largo de la frontera, así como una fuerte disminución en los cruces no autorizados, informa CBS News.

Si bien el número de llegadas a Denver llegó a 378 personas el día antes de que expirara el Título 42 el 11 de mayo, los números han disminuido en los últimos días. El miércoles llegaron a la ciudad 109 personas.

Antes del aumento de personas en mayo, las cifras de llegadas eran de uno y dos dígitos desde febrero (Denver movilizó por primera vez sus operaciones de emergencia cuando llegaron cientos en diciembre y enero). Aún así, Denver continúa albergando a 146 personas en instalaciones de la ciudad y a más de 1,000 personas en refugios administrados por organizaciones sin fines de lucro y otros socios de la ciudad.

Si bien algunas personas eligen quedarse en Denver, muchas simplemente están de paso de camino a otras ciudades donde las personas tienen familiares y amigos.

Los funcionarios de Denver dijeron que los funcionarios de Texas le dieron a la ciudad un aviso de 24 horas. Los funcionarios de la ciudad no saben si vendrán más autobuses.

En respuesta a la pregunta de Denverite sobre si había más autobuses en camino o si los migrantes tenían opciones de destino, la División de Manejo de Emergencias de Texas envió la siguiente declaración:

“Bajo la dirección del Gobernador, nuestras misiones de autobuses fronterizos continúan con autobuses adicionales que salen diariamente de las abrumadas comunidades fronterizas de Texas. Antes de abordar los autobuses patrocinados por el estado, cada migrante firma un consentimiento voluntario de exención de viaje que indica que su destino final en el autobús es la ciudad de Nueva York, Washington D.C., Filadelfia, Chicago o Denver”.

Un grupo de 41 migrantes que recientemente ingresaron a los EE. UU. llegó a Denver.

Tampoco está claro por qué Abbott eligió este momento, con la caída del número de llegadas y los cruces fronterizos.

“Hasta que el presidente y su administración den un paso al frente y cumplan con su deber constitucional de proteger la frontera, el estado de Texas continuará transportando a los migrantes a ciudades santuario autoproclamadas como Denver para brindar el alivio que tanto necesitan nuestros pequeños pueblos fronterizos”, escribió Abbott. en un comunicado que tuiteó el jueves.

El alcalde Michael Hancock llamó al autobús fletado de Abbott “teatro político”.

“Lo que está sucediendo en la frontera y lo que está apareciendo en las puertas de las ciudades de todo el país es una crisis humanitaria”, escribió Hancock en un comunicado el jueves. “Lo que ninguno de nosotros necesita es más teatro político y juegos partidistas que enfrenten a las jurisdicciones entre sí y exacerben esta situación en lugar de abogar por soluciones reales a este desafío. Si el gobernador Abbott piensa que va a ganar aliados para su causa aquí en Denver con este último truco, estará muy equivocado. Y estamos más que felices de enviarle la factura por cualquier apoyo adicional que tengamos que brindar ahora debido a su fracaso en la gestión de su propio estado”.

Las ciudades de todo el país han respondido a la llegada de inmigrantes, dejando al descubierto los conflictos políticos sobre la política de inmigración de Estados Unidos.

Denver y otras ciudades dirigidas por demócratas prometieron albergar a las personas como una forma de hacer retroceder el sentimiento antiinmigración de los republicanos.

Los líderes demócratas han criticado los autobuses como trucos políticos que utilizan la vida de personas reales: algunos de los autobuses llegaron a Washington D.C. a la residencia de la vicepresidenta Kamala Harris. Y en el otoño de 2022, los migrantes dijeron que fueron “engañados” para abordar vuelos enviados por el gobernador de Florida, Ron DeSantis, desde Texas a Martha’s Vineyard, Massachusetts. Los migrantes dijeron que les prometieron empleos y recursos, pero los funcionarios de Massachusetts no sabían el venían aviones.

Mientras tanto, el alcalde Michael Hancock ha pedido más dólares federales para apoyar los esfuerzos de respuesta de las ciudades y para que el Congreso apruebe la reforma migratoria.

“El Congreso y el gobierno federal no están haciendo su trabajo”, dijo Hancock en una conferencia de prensa la semana pasada. “El Congreso debe dejar de jugar a la política con este problema y aprobar una legislación para solucionar estos desafíos”.

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