Mary Flores 
» EL PRESIDENTE TRUMP
De acuerdo a un anuncio hecho por el mismo presidente Trump dijo que firmará una orden ejecutiva para proteger a los bebés nacidos prematuramente o después de sobrevivir a un aborto, anunció el miércoles.
“Hoy, anuncio que firmaré la Orden Ejecutiva de Born Alive para asegurar que todos los preciosos bebés nacidos vivos, sin importar sus circunstancias, reciban la atención médica que merecen”, dijo el comandante en jefe a los asistentes mientras entregaba el discurso de apertura en el Desayuno Nacional de Oración Católica.
“Este es nuestro sacrosanto deber moral”, comentó el presidente en el evento virtual.
La orden estaba destinada a fortalecer los esfuerzos pro-vida, aunque no se explicó de inmediato qué haría específicamente.
En su discurso, Trump también anunció un aumento en la financiación federal para la investigación neonatal “para garantizar que cada niño tenga la mejor oportunidad de prosperar y crecer”.
El presidente continuó promocionando la importancia de las escuelas católicas para ofrecer a los niños desatendidos la oportunidad de una mejor educación.
El evento del miércoles también incluyó al Fiscal General William Barr, un católico practicante, quien en su discurso, el AG señaló: “Como [George] Washington y sus compañeros fundadores entendieron, que la religión está en el corazón del experimento estadounidense de autogobierno”.
Barr pasó a denunciar a los “secularistas militantes”, argumentando que estaban eliminando la religión de la sociedad y, con ella, también la moral estadounidense.
“En el discurso público estadounidense, tal vez ningún concepto sea más malinterpretado que la noción de separación de iglesia y estado”, comenzó.
“Los secularistas militantes se han apoderado de ese lema durante much tiempo como una fácil justificación para intentar sacar la religión de la plaza pública y para excluir a las personas religiosas de aportar una perspectiva religiosa a las conversaciones sobre el bien común”.
“La separación de la iglesia y el estado no significó, y nunca significó, la separación de la iglesia y la educación cívica”, explicó.
Barr continuó argumentando que la religión en la vida estadounidense estaba “sitiada por los secularistas”.
“Las consecuencias de este vaciamiento de la religión han sido previsiblemente nefastas. Durante los últimos 50 años, hemos visto incrementos sorprendentes en la violencia urbana, el abuso de drogas y las familias desintegradas. Problemas como estos han alimentado el surgimiento de un gobierno central cada vez más poderoso “.
Barr en otros tiempos ha expresado su apoyo a la libertad religiosa.
